Colombia recibirá temporalmente a refugiados afganos que trabajaban con Estados Unidos

Colombia, uno de los principales aliados de Washington en América Latina, ha alcanzado un acuerdo para recibir temporalmente en su territorio a ciudadanos afganos que trabajaban con el Gobierno de Estados Unidos en Afganistán. Los acogerá mientras tramitan sus papeles para refugiarse en el país norteamericano, después de la toma del poder por parte de los talibanes y la retirada de las tropas estadounidenses, confirmó este viernes el presidente Iván Duque desde la hogar de Nariño.

“Hoy se materializa lo que en días pasados habíamos empezado a construir al más alto nivel con los Estados Unidos, y es que Colombia también se une al grupo de países aliados que va a ofrecer apoyo para aquellas personas nacionales de Afganistán que le prestaron ayuda a los Estados Unidos por años y que están en proceso de hacer un registro y un traslado migratorio a ese país, para que estén en Colombia temporalmente”, explicó Duque en una breve declaración conjunta con el embajador estadounidense, Phil Goldberg.

Sin entrar en detalles, ni dar plazos ni cifras concretas, el mandatario señaló que Washington va a sufragar todos los costos y agilizar los procesos para que los afganos puedan regularizar su situación migratoria en el país norteamericano. “La hospitalidad para este esfuerzo de corto plazo será colombiana. Los costos, estadounidenses”, reafirmó el embajador Goldberg al agradecer el gesto de Bogotá.

Colombia es el principal país de acogida de la diáspora de la vecina Venezuela, que ya supera los cinco millones de personas, y ha mantenido una política de flexibilidad migratoria sometida a una enorme presión social. En los últimos años ha recibido a más de 1,7 millones de migrantes venezolanos y el Gobierno Duque se propone regularizarlos mediante un estatuto temporal de protección ampliamente elogiado por la comunidad internacional como un compromiso con los derechos humanos.

El anuncio se produce también en momentos en que Washington se esfuerza por persuadir a países aliados de que acepten refugiados afganos en medio de la estampida que ha representado la caótica salida de Kabul. Aunque EE UU ha anunciado su intención de poner fin el 31 de agosto a la evacuación de personas en peligro en Afganistán, varios de sus aliados de la OTAN le han pedido que prolongue la operación para sacar del país al mayor número posible de afganos.

El problema no es el destino de los afganos en peligro, sino lograr que lleguen al aeropuerto de Kabul para ser evacuados, según declaraba más temprano el viernes el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, al señalar los debates en curso sobre los lugares para la estancia temporal y el alojamiento de los afganos que salgan de Afganistán.

“El acuerdo con el Gobierno de Bogotá incluye afganos que son titulares de visas de refugiado, aquellos que son elegibles para visas especiales de inmigrante y aquellos que han sido nominados para ser elegibles por el Gobierno de Estados Unidos”, según informó el periódico The Wall Street Journal anticipándose al anuncio oficial. De acuerdo con el Journal, el pacto con Colombia podría cobijar hasta 4.000 afganos.

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