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Modas

Cinco claves para iluminar y hacer brillar tu hogar

Es impensable colocar una lámpara de pie excesivamente grande en un espacio pequeño, al igual que para un amante de la lectura antes de irse a dormir resulta imposible no contar con una pequeña lámpara en la mesilla de noche. Del mismo modo que el resto de los elementos del hogar, la iluminación es un componente decorativo que debe adaptarse a las necesidades de quién la disfruta, pero también es un elemento clave en el estilo y para el resultado del interiorismo, que puede cambiar completamente un rincón o habitación.

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Espacio decorado por Maisons du Monde

Luz cálida para un buen estado de ánimo

La iluminación es uno de los elementos más importantes manejado por expertos de marketing en el diseño de los espacios, y como tal, no se debe pasar por alto su influencia en el estado de ánimo, fuera y dentro del hogar.

Jose Agenjo, arquitecto de interiores y fundador de Devesa y Agenjo Interiorismo junto a Ana Devesa, afirma que «la iluminación afecta al estado de ánimo al igual que los colores». «Una iluminación muy blanca crea ambientes más fríos, por lo que querremos estar menos tiempo en ellos. Al contrario, las temperaturas más cálidas, de manera indirecta combinadas con lámparas de fibras nos darán una mayor sensación de confort», explica el profesional.

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Escena con decoración de El Corte Inglés

Evita la luz cenital en espacios pequeños

Además de influir en el estado de ánimo, la iluminación también es capaz de moldear espacios y crear ilusión de mayor o menor amplitud. En el caso de espacios y hogares pequeños, los expertos recomiendan no introducir luz cenital. Adriana Nicolau, experta en interiorismo y decoración, explica de forma clara que, en el caso de tener que utilizarla, lo más adecuado es ubicar estos puntos de luz «de forma agrupada y en esquinas o zonas estratégicas, nunca desperdigados por toda la estancia», señala la profesional. De la misma manera, escoger la lámpara de techo adecuada para no dar una mayor sensación de espacio reducido es clave. La pieza no debe tener demasiado volumen, un claro ejemplo del clásico ‘menos es más’.

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Espacio decorado por El Corte Inglés

Iluminación oculta, la nueva tendencia

En ocasiones, lo más adecuado puede ser que el soporte de iluminación no sea visible. Para los amantes del arte, como es el caso de la diseñadora Adriana Nicolau, las lámparas escultura son una gran opción, pero si lo que se busca es dar protagonismo a ciertas zonas sin ninguna lámpara o figura, las tiras led son un recurso que ha ganado terreno en los últimos años. «Con ellas podemos bañar paredes o acentuar texturas, pero en el momento que se ve la fuente de luz, ese protagonismo se lo lleva el propio led», explica Nicolau. A todo esto, Agenjo añade un nuevo concepto: el ruido visual. Para él, una de las mayores ventajas de este producto es que «permite eliminar ruido estético suprimiendo puntos focales y equilibrando el diseño con lámparas decorativas», señala.

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Espacio decorado con piezas de Maisons du Monde

Utilidad, una de las máximas al elegir

Además de tener en cuenta la estética y el papel decorativo de la lámpara, una de las máximas a tener en cuenta es su utilidad y el por qué de la ubicación seleccionada. Uno de los puntos más frecuentes escogidos para situar una lámpara o punto de luz es junto a butacas o mesas de trabajo. Además de esto, si bien el tipo de luz es importante siempre, en estos momentos es esencial, ya que debe contribuir al bienestar y capacidad de concentración durante largos periodos de tiempo. Según los gustos, una lámpara de pie junto al despacho puede ser una buena opción, al igual que una lámpara de mesa, que según explica Jose Agenjo, «aportan un plus para crear diferentes escenas mientras suman volúmenes como objetos decorativos», explica.

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Espacio decorado con piezas de El Corte Inglés

La unión hace la fuerza

Las lámparas no deben elegirse como elemento único, sino que se debe tener en cuenta el estilo del resto de la casa. Aunque es posible introducir piezas que den un contrapunto y rompan con el estilo predominante, es un riesgo que se debe saber manejar. En el caso de principiantes o de buscar la elección más simple, seguir tonos ya presentes en la sala es lo más adecuado. Un ejemplo de ello es la presencia de dorados: seleccionar un pie de este color en el caso de tener piezas y adornos de este estilo puede ser una buena elección. Lo mismo ocurre con el estilo. Si en el hogar predomina la línea minimalista, las formas finas y simples irán en perfecta sintonía, mientras que una lámpara tallada o con detalles en pintura puede ser el contrapunto perfecto y dar un toque de personalidad al espacio.

Fuente

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