Los dos estilismos de la reina Letizia que demuestran que vestir de negro no es aburrido

La reina ha demostrado con sus dos últimos estilismos que vestir de negro no es aburrido y que sigue siendo una de las maneras más sencillas de brillar en cualquier evento. Sin duda, el look que eligió para acudir a la inauguración de Fitur ha sido el más comentado, incluso en la prensa internacional. Doña Letizia apostaba por un ‘total black’ en el que resaltaba el jersey con cuello babero en color blanco. Se trata de un modelo de punto de alpaca y lana de de la firma Sandro, con escote en V, manga larga y cuello extraíble de popelina en blanco. Su precio original era de 235 euros, pero ahora está rebajado a 141 euros. En algunos medios, como el Daily Mail, han hablado del glamur gótico de la reina, comparándola con la misma Miércoles Addams.

La reina combinaba el jersey, la pieza clave del look, con unos pantalones de Hugo Boss en color negro, de tiro alto, con pinzas y largo hasta el tobillo. En los pies, llevaba unas botas de piel negra de Unisa, con la punta cuadrada y tacón ancho y bajo, perfectas para recorrer la Feria de Turismo. En cuanto a las joyas, elegía los pendientes Doble Daga de Gold & Roses, de oro blanco y brillantes, y el anillo que estrenó de firma italiana que estrenó en la Pascua Militar, y que ha sustitudo al de Karen Hallam que fue su favorito en 2022.

Hay que destacar también el acierto con el peinado: una coleta alta envuelta con un mechón de pelo y con las puntas ligeramente onduladas. Doña Letizia cedía así todo el protagonismo al rostro y al cuello para que se pudiera admirar el detalle del jersey. El maquillaje, en tonos rosas, y con abundante máscara de pestañas, combinaba a la perfección con el estilismo. La reina sigue presumiendo de una piel luminosa y muy juvenil a sus 50 años.

Para terminar la semana, la soberana volvía a vestirse de color negro con gran acierto. Para protegerse del frío elegía un abrigo negro con mangas anchas y cinturón. Debajo llevaba una falda de cuero con cinturón de Hugo Boss, que ya había estrenado, y que combinó con una bonita blusa de la firma sostenible Pol Studio que también había llevado ya. La camisa, en azul turquesa, con cuello redondo y mangas abullonadas, le daba al look negro un toque de color muy apropiado.

Los complementos, como no podía ser de otra manera, también eran negros: el bolso Doma de Carolina Herrera y los salones de Magrit. Pero aún había otro detalle más que animaba el look: los pendientes. Largos y con pedrería en diferentes colores (rosas, verdes y azules), son de la firma española Alexandra Plata, según han confirmado a través de su perfil de Instagram. Los había llevado ya en 2020, así que ya no están a la venta.