Connect with us

Deportes

Barcelona – Real Madrid, un clásico muy alejado del foco

«¡Hay un clásico, eh!». De esta manera tan contundente irrumpía Sergi Barjuan en el corrillo de veteranos del Barcelona y del Real Madrid que esta semana participaron en el tradicional torneo de golf y pádel organizado por Nacex. Carles Rexach, Gerard López, Pichi Alonso, Lluis Carreras, Miquel Àngel Nadal, Julio Salinas y Jonathan Soriano se sobresaltaban por la exclamación del exlateral azulgrana, molesto por el hecho de que el caso Negreira haya llegado a eclipsar el Barcelona-Real Madrid que se juega mañana, un partido que acapara la atención de aficionados de todo el mundo y del que, habitualmente, no para de hablarse en las jornadas previas.

A pesar de que puede resultar decisivo para la resolución de la Liga, el encuentro ha quedado diluido durante la semana por los problemas judiciales que se ciernen sobre el club catalán debido a los pagos realizados durante años al ex número dos de los árbitros españoles. Con nueve puntos de ventaja sobre los de Ancelotti, una victoria en este clásico casi clandestino dejaría servido el título en bandeja al equipo de Xavi.

Las cuestiones extradeportivas que acaparan la atención de medios de comunicación y aficionados desde que hace dos semanas estallara el caso Negreira han tejido una niebla que parece haber dejado el partido en sí en un segundo plano. Los ejercicios de campo son muy prácticos para pulsar el estado de ánimo de las aficiones y solo hay que dejarse empapar por los diálogos de bar y las tertulias callejeras para constatar que, en los últimos días, pocos seguidores se han preocupado por si Pedri se recupera a tiempo, por si las molestias de Benzema le permitirán estar en el Camp Nou o por si el resultado del choque puede resultar definitivo. En una semana de clásico poco se ha hablado de esquemas o tácticas, sí mucho de la Fiscalía y la querella por el caso Negreira.

La aceptación a trámite de la demanda presentada por la Fiscalía y la querella del exárbitro Estrada Fernández, la derivación del caso a Anticorrupción, la decisión del Real Madrid de personarse a la causa o el robo en casa de la jueza que instruye el caso han ido eclipsado sucesivamente el partido de mañana, a pesar de que en este Barcelona- Real Madrid no solo estarán en juego tres puntos. También que la Liga se pueda dar por finiquitada en caso de triunfo azulgrana o que el interés y la emoción del campeonato renazcan si el conjunto de Ancelotti es capaz de reducir su desventaja a solo seis puntos.

El interés por el encuentro se ha limitado al hipotético favor arbitral del que habría gozado el Barcelona durante la época en la que tuvo contratados los servicios del exárbitro José María Enríquez Negreira mientras este era vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA). Es decir, de 2001 a 2018. «Yo en ningún momento he visto nada de parcialidad. Ahora mismo hay un proceso con gente que sabe y que es la que debe tratar este asunto», apuntaba Barjuan.

El más beligerante con este espinoso asunto es Enric Masip, leyenda del equipo de balonmano azulgrana y actualmente asesor a la presidencia del Barça y miembro de la secretaría técnica. «Estamos muy tranquilos, el Barça no ha hecho nada malo, no hay nada irregular, no hemos comprado ningún árbitro ni nada. No tenemos miedo a que nos pase nada. Hay cosas habituales, que se han hecho muchos años y las han hecho muchos clubes. Hay que mirarlo, no pasa nada, pero sin que nadie haya decidido nada haces una campaña…Hay un circo mediático que mancha», intentó dejar claro uno de los componentes del núcleo duro de Laporta.

Advertisement

Almuerzo de directivas

Los prolegómenos tampoco están exentos de polémica y nadie habla de posibles alineaciones en el clásico. La atención está centrada en el habitual almuerzo de directivas y en el estado de la relación entre Joan Laporta y Florentino Pérez tras la decisión del Madrid de sumarse a la causa contra el Barça en el caso Negreira.

A pesar de ello, en el Barcelona están tratando que esta situación no afecte al aspecto deportivo. Xavi Hernández ha decidido intervenir para impermeabilizar a su plantilla y que todo el ruido externo no le afecte en un momento en el que pueden dejar sentenciada la Liga. Mientras se espera que el presidente dé las explicaciones oportunas, el técnico ha puesto en marcha una terapia con sus jugadores, manteniendo charlas con el grupo para pedirles que se aíslen y se centren en el partido.

Arenga de Laporta

En un intento por calentar la temperatura ambiental del duelo y de enganchar al clásico a la afición azulgrana, el presidente Laporta lanzaba este viernes una arenga a través de los medios del club. «Este domingo tenemos un gran partido. Venid a animar al equipo más que nunca. Tenemos una gran oportunidad de acercarnos al objetivo de esta temporada, que es ganar la Liga. Una gran oportunidad», recalcaba.

En su habitual papel victimista, Laporta aprovechaba su discurso para referirse, a su manera, al caso Negreira. «La campaña que estamos sufriendo no es por casualidad, lo sabéis todos. Tiene como objetivo, a corto plazo, desestabilizar al equipo y, a medio plazo, controlar el Barça; quedárselo. Tiempo habrá, y tengo ganas, de explicaros quién, por qué y cómo están orquestando esta campaña», afirmaba. «No tengáis ninguna duda de que nos defenderemos y, no solo nos defenderemos, atacaremos», advertía.

«Ahora quiero que nos concentremos en animar al equipo este domingo, porque el primer objetivo que tienen es destabilizar al equipo y nos tenemos que centrar en animar al equipo, a nuestros jugadores y entrenadores, para que ganen el partido», pedía.

Advertisement

Fuente

Advertisement

Nacional

Más

Populares