Si bien los bancos han mejorado, el aumento de la competencia los empuja a innovar continuamente en sus plataformas digitales. A medida que la tecnología avanza al ritmo de la innovación, los bancos enfrentan el desafío de incursionar en nuevas áreas y ampliar los límites de sus capacidades.
Por eso los bancos ahora se están enfocando en maximizar la velocidad para generar valor. Esto significa brindar soluciones a los clientes: cuándo (las 24 horas del día, en tiempo real), dónde (físico, digital, móvil) y cómo (diversos servicios financieros y no financieros) lo desean.
Los bancos tradicionales siguen siendo líderes del mercado y han realizado mejoras admirables en el último año. Sin embargo, corren el riesgo de no moverse lo suficientemente rápido para mantenerse al día con la demanda de los consumidores, que cambia constantemente y se eleva en alcance y sofisticación.
Cambiar su mentalidad de institución financiera a una plataforma de engagement banking ayudará a los bancos a acercarse a los consumidores y prepararlos para el futuro a medida que evolucionen sus expectativas y demandas.