Estamos en un mundo de mucha mayor competencia, en el que fintech y banca tradicional perfeccionan su oferta constantemente y cuyos usuarios cambian de perfil a la misma velocidad. Ante esto, la pregunta es ¿cuáles, de esas instituciones financieras, sobrevivirán a otra crisis?
Cambio de viraje
La crisis inflacionaria de 2022 ya tiene un impacto fuerte sobre la industria financiera, sobre todo para las startups que buscan una disrupción del mercado. Los fondos de inversión inyectan cada vez menos capital de riesgo en medio de contextos de incertidumbre. Las fintech en proceso de consolidación deben ser lo más atractivas posibles a inversionistas para continuar con la expansión que han mostrado en años recientes.
Así como la pandemia modificó las finanzas y la operación empresarial en su conjunto, una crisis del tamaño de la actual necesariamente cambiará las dinámicas del mercado bursátil en el corto y mediano plazo. Sin embargo, si sus apuestas en momentos de inflación reditúan, es altamente probable que las tendencias que se han observado hasta ahora cambien de viraje por completo.
Dupla de oro
Pero el sector financiero tiene a un aliado de oro desde tiempos inmemorables para hacer frente a momentos complicados: la tecnología, que goza de un papel particularmente privilegiado actualmente. La industria financiera se distingue porque siempre ha apostado por la innovación, e incluso en un periodo de crisis es cuando más vale la pena redoblar esfuerzos.