Opinión
No es un buen día para viajar a Abilene
Actualizado: Guardar
Desde su inicio, hace 15 años, el sistema de dependencia ha sido una cenicienta administrativa con la que nadie quería bailar, aunque la corrección política nos animara a cerrar filas en torno a los deseos e intenciones que la inspiraban.
Hace cincuenta años no se pensaba que el cuidado fuese un tema de estudio. Hoy nos interpela a las administraciones, exigiendo que escuchemos, atendamos y resolvamos una situación que afecta a nuestros padres y madres y, más pronto que tarde, a nosotros mismos.