Connect with us

Deportes

Lukaku y la maldición llamada Chelsea

Madrid Actualizado: Guardar

Es noticia de mercado que el jugador belga, Romelu Lukaku, pasa cedido de Chelsea al Inter de Milán, donde vuelve tras su etapa ganadora en 2020 y 2021. Los dos equipos acordaron este miércoles la cesión por un año de Lukaku, que ya ha superado las pruebas médicas. El belga regresa a Milán después de ‘fallar’ por tercera vez en su intento de triunfar en el conjunto londinense. La maldición del club inglés golpea nuevamente al delantero que por tercera vez fracasó en los ‘Blues’ sin poder demostrar su valor real. Las temporadas anteriores en ‘Stamford Bridge’, con Villas-Boas antes y José Mourinho después, fueron un completo desastre para un jugador que sucesivamente logró rescatarse en otros clubes.

La de Lukaku en el Chelsea es una larga historia que comenzó en agosto de 2011, cuando Villas-Boas inició el curso con el joven fichaje del Anderlecht

como refuerzo para su plantilla. Quince millones costó un chico de 19 años, un delantero físico con sentido del gol, 19 y 20 tantos en las dos campañas precedentes en el campeonato belga.

Romelu Lukaku llegó al equipo entrenado por el portugués con todas las condiciones para convertirse en la estrella del club, pero el primer año no fue como esperaba y tuvo escasas presencias en las alineaciones (ocho) en el campeonato inglés, ninguna en la Champions League (que acabó levantando el propio Chelsea aquel año). Su sequía goleadora, ni un solo tanto, y el poco espacio del que gozó en su equipo empujaron al poderoso atacante belga a salir por primera vez del conjunto londinense, eligiendo la fórmula de la cesión al West Bromwich. En este equipo jugó 35 partidos y marcó 17 goles, la primera gran explosión del belga. El jugador confirmó ser un nueve con un potencial válido para equipos de élite, aunque la suerte volvió a serle esquiva en Londres.

Advertisement

Esa brillante campaña provocó su vuelta al Chelsea, este vez con otro entrenador portugués en el banquillo, José Mourinho. Como ocurriera con Vilas-Boass, con Mou tampoco gozó de oportunidades. Tras la derrota del equipo londinense en la Supercopa de Europa, en la que el belga falló el lanzamiento definitivo en la tanda de penaltis, el técnico decidió que el delantero no formará parte de su plantilla.

Tras disputar dos partidos en la Premier League, el Chelsea lo cedió en agosto al Everton, donde consiguió consagrarse. En esa temporada celebró 15 goles en 31 partidos, un botín que convenció al conjunto de Liverpool para acometer su compra definitiva. El Chelsea se embolsó 35 millones y Lukaku se convirtió en el pilar de los ‘Toffees’: 166 partidos y 87 goles en cuatro años fueron el resumen de la etapa del poderoso atacante belga en el equipo ‘toffee’.

En el verano de 2017 volvieron a cruzarse las carreras de Lukaku y Mourinho. Ese año, el Manchester United desembolsó 84,70 milloness de euros para fichar al atacante. La química con el entrenador de Setúbal resultó mejor que en su primera aventura juntos en el Chelsea. El belga estuvo en Old Trafford dos campañas, en las que afrontó 96 partidos y marcó 42 goles.

La aportación del ‘gigante’ belga llamó la atención del Inter de Milán, que lo fichó por 74 millones de euros. El delantero confirmó en el fútbol belga su protagonismo goleador, consiguiendo 64 dianas en dos años. Su aportación resultó clave para que el conjunto interista se quitara por fin la etiqueta de ‘equipo perdedor’, ganando la liga italiana después de un largo dominio de la Juventus.

Tras esa nueva explosión, el delantero, entonces con 29 años, recibió el pasado verano una oferta del Chelsea difícil de rechazar: el doble de sueldo para él y 113 millones de euros para el Inter. Ocho años después, Lukaku regresó a Stamford Bridge con ganas de reivindicarse y triunfar, en su tercer intento, en el conjunto londinense. Pero la maldición volvió a repetirse en el club inglés esta temporada. Muchos errores y pocos goles resultaron el denominador común del año de Lukaku en Londres. Sus 8 tantos no compensaron el esfuerzo económico que realizó el club londinense para devolverlo a ‘casa’. La relación con Tuchel, su entrenador, nunca fue idílica y el el Inter ha recuperado hoy a su antiguo jugador para reforzar la delantera de la próxima temporada. Una llegada en forma de cesión.

Advertisement

Ver los comentarios

Fuente

Advertisement

Nacional

Más

Populares