Connect with us

Opinión

El valor de los informes de sostenibilidad

En consecuencia, esto ha permitido que, al haber una mayor cantidad de información pública del desempeño “no financiero” (en donde entran los temas de responsabilidad social y sostenibilidad) del sector privado, también se hayan desarrollado servicios de evaluación, calificación o rankeo de empresas con base en diversas metodologías, para ser tomadas en cuenta en las decisiones de inversionistas y diversas instituciones financieras, para quienes les agrega valor invertir en este tipo de empresas o hacer negocios con ellas, como parte de su compromiso con principios e iniciativas de inversión socialmente responsable.

Pero no se trata de publicar información sólo por publicarla, ni de tener compendios de datos y gráficas sin el más mínimo análisis, ni tampoco de documentos larguísimos que nadie leerá, sino de un ejercicio estratégico y de gestión de la información, que le permita a la empresa enfocarse en la medición y comunicación de los temas más relevantes o significativos para ésta y para sus grupos de interés a los que busque dirigirse.

Una herramienta que puede ayudar en este sentido es el llamado análisis o estudio de materialidad, el cual permite identificar y priorizar los temas de sostenibilidad que le son materiales, es decir aquellos en donde sus operaciones, productos o servicios generan los mayores impactos, no sólo desde el punto de vista de la empresa, sino también de sus principales grupos de interés.

Así, por ejemplo, para una empresa de bebidas, entre sus temas materiales estarían trabajar en torno al uso y conservación del agua y en el reciclaje de sus envases de plástico, por los impactos que sus productos generan en las comunidades y el medio ambiente.

Este estudio también podría realizarse desde el enfoque financiero, es decir, analizando los impactos, riesgos y oportunidades que tienen los temas de sostenibilidad en el desempeño futuro del negocio (por ejemplo, cómo impacta el cambio climático la disponibilidad de sus insumos o qué oportunidades de negocio puede tener al adoptar un modelo de producción circular); e incluso se pueden combinar ambos enfoques para abarcar una doble materialidad que considere la interdependencia que comúnmente se observa entre el desempeño de responsabilidad social y el desempeño financiero de cualquier organización.

De esta manera, la empresa se puede enfocar a gestionar de mejor manera un menor número de temas, considerados como los más importantes por sus características y contexto, evitando distraerse o dedicando tiempo y recursos a otros muchos temas irrelevantes o donde sus acciones realmente no impactan significativamente.

Advertisement

Por ejemplo, para una empresa del sector de alimentos, es poco relevante que reporte que no contrata a menores de edad en sus oficinas corporativas, ya que es lo que de manera obvia se esperaría, pero sí sería muy relevante que reporte sus objetivos, metas, acciones y avances para abordar el tema del trabajo infantil, ya sea con sus proveedores o directamente en el campo, donde sí existe el riesgo de que haya menores de edad involucrados como parte de su cadena de suministro.

Por ello la elaboración de informes de sostenibilidad se considera ya una herramienta valiosa para la gestión de la responsabilidad social de una empresa con un enfoque estratégico orientado a la transparencia y rendición de cuentas ante los grupos de interés, como resultado de una reflexión y análisis de la interrelación que existe entre sostenibilidad y permanencia en el mercado a largo plazo.

De ahí, el surgimiento de los informes integrados, que incorporan en un solo documento el informe anual o financiero con el de sostenibilidad, permitiendo presentar un panorama más completo del desempeño de la organización.

Nota del editor: Jorge Reyes Iturbide es especialista en responsabilidad social empresarial y desarrollo sostenible y desde hace 17 años ha trabajado para diversas empresas y organismos nacionales e internacionales en proyectos de investigación, consultoría, desarrollo de estándares y educación ejecutiva en la materia. Actualmente es Director del Centro IDEARSE de la Universidad Anáhuac México. Síguelo en Twitter y LinkedIn . Las opiniones publicadas en esta columna pertenecen exclusivamente al autor.

Advertisement

Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión

Expansión – Opinión

Nacional

Más

Populares