Simancas calla tras la reprimenda de la FAPE por su intento fallido de desacreditar a ABC

Actualizado:06/05/2022 01:59h Guardar

La Moncloa guardó ayer silencio tras ser preguntada si el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Rafael Simancas, va a retractarse tras su intento de desacreditar una información publicada por ABC sobre la reforma de la Ley de Seguridad Nacional, después de que las asociaciones de la prensa ampararan a este diario y calificaran la información como «veraz» y de «interés general».

Simancas intentó cuestionar la credibilidad de la noticia, firmada por Ana I. Sánchez, a través de su cuenta de Twitter. Para ello, publicó una imagen manipulada de la consideración final del informe elaborado por el Consejo de Estado sobre la ley, en el que se sustentaba la información. En la imagen, aparecía borrado el grueso de la cuarta línea, donde se iniciaban las críticas finales al texto del Gobierno, para que pareciera que tales reproches no existían. También desaparecían los renglones posteriores de esa consideración final, igualmente críticos. Además, Simancas denunciaba que la información de ABC no contaba que el Consejo de Estado consideraba constitucional la norma del Gobierno, cuando esta conclusión era el arranque de la misma.

Reproche

La redactora de ABC, quien recibió el apoyo de profesionales de medios de comunicación de toda sensibilidad ideológica, respondió ese mismo día a Simancas para criticar su manipulación. Al transcurrir una semana sin que el secretario de Estado se retractara, pidió amparo a la Federación de Asociaciones de Periodistas (FAPE), respaldada por este diario. En una carta dirigida al director de este periódico, Julián Quirós, las asociaciones de la prensa mostraron su total apoyo a la periodista por su información «veraz», de «interés general», «verificada» y «contrastada». Al mismo tiempo, condenó «cualquier intento de utilización de las redes sociales que tenga como objetivo atacar la credibilidad y prestigio de los periodistas y de sus medios de comunicación en los casos en que publiquen informaciones veraces, de interés general y que estén debidamente verificadas y contrastadas». Y además, en su misiva quiso remarcar que ningún tuit del secretario de Estado «puede disminuir el grado de credibilidad y prestigio de Ana Isabel, cuya labor profesional respaldamos en el caso que nos ocupa».

Un mes para responder

El Grupo Popular, ve en esta actuación de Simancas un claro ataque a la libertad de prensa. La resolución de la FAPE se conoció en el Día Mundial de la Libertad de Prensa y la número dos del partido, Cuca Gamarra, aprovechó para subrayar que «queda todo dicho sobre cómo actúa el Gobierno», mientras el vicepresidente de la Comisión para la auditoría de la calidad democrática del Congreso, el popular Jaime Olano, cargó contra el Ejecutivo considerando que «no se limita a mentir con absoluta desvergüenza, sino que incluso manipulan burdamente informes del Consejo de Estado para mantener sus mentiras.

Además, los populares han registrado una batería de preguntas al Gobierno en el Senado, tras hacer lo propio en el Congreso. La Moncloa tendrá que contestar a las senadoras Amelia Salanueva Murguialday y Cristina Ayala si «¿le parece razonable este proceder al Gobierno de España?», ¿cuál es la «valoración que hace el Gobierno de España de la manipulación realizada por el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Sr. Simancas, para desmontar una información de un medio de comunicación y desacreditar a su autora?» o si «considera el Gobierno que la libertad de prensa está suficientemente garantizada en España».

El diputado por el Grupo Mixto Pablo Cambronero también ha trasladado varias cuestiones concretas al Gobierno, como si conoce «el grave caso de manipulación», si comparte la estrategia del secretario de Estado para desacreditar una información, si piensa «corregir» ese «estilo tramposo», qué valoración hace de que se proceda así contra una información veraz y si es práctica habitual contra informaciones «que no son de su agrado». También en el Congreso, el PP preguntó la semana pasada, si era conocedor del «grave caso de manipulación», si comparte la estrategia de Simancas para desacreditar una información, si piensa «corregir» ese «estilo tramposo» y qué valoración hace de que se proceda de esta manera contra una información veraz.

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