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Las aerolíneas y Renfe preparan planes especiales para evitar que ómicron paralice el transporte en España

Las aerolíneas de todo el mundo han cancelado más de 8.400 vuelos durante el fin de semana de Navidad debido a que la variante ómicron del coronavirus que continúa extendiéndose por todo el planeta, contagiando a cientos de pilotos y tripulaciones o provocando su cuarentena, lo que imposibilita los viajes. En España, la situación es aún de casi completa normalidad aunque las aerolíneas, Renfe y, en general las empresas de transportes de viajeros preparan planes de contingencia ante una posible explosión de contagios entre su personal que limitara la capacidad de respuesta en unas fechas en las que el número de viajeros se incrementa.

Fuentes del sector aéreo y de las compañías señalaron a este diario que esperan que el pico de incidencias por la extensión de ómicron se produzca entre la primera y la segunda semana de enero, coincidiendo con la vuelta de vacaciones navideñas, para lo que ya están disponiendo planes especiales para paliar una posible falta de personal que pueda causa la sexta ola de la pandemia, con la movilización de voluntarios y de retenes de guardia para cubrir las bajas.

Y es que hasta la media tarde ayer lunes, día 27, se cancelaron 2.621 vuelos en todo el mundo, una cifra ligeramente inferior a los 3.273 vuelos anulados el día de Navidad y los 2.400 que se suspendieron en Nochebuena, según la web especializada de tráfico aéreo en tiempo real FlightAware. Los retrasos se elevaron a más de 9.000 vuelos solo ayer alcanzaron los 16.000 durante todo el fin de semana. Aproximadamente la mitad de esos vuelos cancelados estaban en Estados Unidos debido a la ola de casos de coronavirus entre el personal de las compañías.

Una ola que no se espera que golpee de lleno a España hasta la semana que viene pero que, por el momento, no afecta con intensidad a los vuelos con origen en España. Así, los aeropuertos de Madrid-Barajas y Barcelona-El Prat, los de mayor tráfico en estas fechas, no han reportado cancelaciones por este motivo ayer, ni tampoco obligaron a muchas reprogramaciones de vuelos, según fuentes de Aena.

Controladores en la torre de Madrid-Barajas.
Controladores en la torre de Madrid-Barajas.Enaire

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Por su parte, Enaire, la sociedad pública encargada de controlar el tráfico aéreo, ante esta sexta ola ha activado una Célula de Gestión de Riesgos entre las unidades de servicios centrales y las diferentes direcciones regionales, que funciona 24 horas, “para gestionar y adoptar las medidas que sean necesarias para garantizar el servicio en todo momento en los centros de control y en las torres de control de los aeropuertos donde Enaire se encuentra presente y que a su vez coordina con las compañías aéreas y con Aena”, informaron fuentes de la empresa, que depende del Ministerio de Transportes.

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Asimismo, está hablando con la Autoridad Nacional de Supervisión (AESA) para poder disponer de distintas medidas que permitan garantizar el servicio si por algún brote severo se viera afectado un número relevante de controladores aéreos o de técnicos de mantenimiento de sistemas técnicos para los servicios esenciales.

Además, ante la virulencia de contagios en esta última ola, Enaire está llevando a cabo una continua gestión de todas las opciones para cobertura de servicios, cambios de controladores aéreos entre servicios. Y para compensar posibles déficit, se han creado bolsas de voluntarios para la cobertura en caso de incidencias, y se está realizando un uso intensivo del personal de imaginarias (controladores que están en su hogar pendiente de incidencias), según las mismas fuentes.

En la línea de la actuación que ha venido manteniendo durante todo la pandemia, ha adoptados una seria de medidas entre las que se encuentra: garantizar que los entornos de trabajo son seguros en materia de prevención; reforzar estas medidas con formación on line en algunas etapas críticas de la pandemia; la rotación y turnos de trabajo de controladores y técnicos que fomenten un menor número de contactos y relevos en los servicios y evitar reuniones (briefings) y actuaciones presenciales que puedan conllevar minorar distancia entre personas.

Compañías aéreas

Por su parte, las compañías aéreas están monitorizando la situación y, por el momento, con la programación y la planificación de recursos de imaginaria (tripulación en hogar pero dispuesta a cubrir cualquier emergencia) están operando todos los vuelos, según fuentes de las compañías consultadas.

La que ha reaccionado más pronto ha sido Vueling que ha acordado con el sindicato Sepla la renuncia voluntaria a días libres de sus pilotos para garantizar la operativa de la compañía durante las fiestas navideñas. Según el Sepla, la medida se ha tomado después de que la tasa de incidencia de la covid-19 haya provocado “numerosísimas bajas médicas en la compañía, poniendo en peligro muchos de los vuelos previstos para la temporada de Navidad”.

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El último informe de Eurocontrol asegura que la extensión de contagios por ómicron ha afectado a los vuelos en Europa en la primera quincena de diciembre, en el que el tráfico aéreo ha supuesto un 75% respecto a los niveles de 2019 por las mismas fechas, aunque aclara que el impacto de la sexta ola en enero es “incierto”.

Tren Avlo de Renfe en la estación de Madrid-Atocha.
Tren Avlo de Renfe en la estación de Madrid-Atocha.Pablo Monje

Renfe también se prepara

Renfe también se prepara ante la llega de la sexta ola del coronavirus. La compañía de transporte ferroviario ha detectado un incremento en las bajas laborales, precisamente como consecuencia del aumento de la incidencia de la covid-19, aunque todavía no está afectando a los servicios más utilizados, que estos días son los de AVE, AVLO y otros trenes de Larga Distancia, informaron fuentes de la empresa pública.

Por tal motivo, está monitorizando en tiempo real los casos que se puedan producir en todas sus áreas, con especial relevancia en aquellas que están relacionadas directamente con la prestación del servicio al cliente. “Allí donde se están produciendo bajas, Renfe está reorganizando procesos y recursos a nivel interno para que la afectación sea mínima en los servicios ferroviarios que prestamos a los ciudadanos”, confirmaron las mismas fuentes.

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